París es una de mis ciudades favoritas, casi
podría decir que es la que mas me gusta, pero tiene que competir con Lisboa. En
enero de 2006 estaba trabajando con una productora en un acto de Exceltur, que
se realizaba en Madrid días antes de FITUR cuando recibí la llamada de otra productora para integrarme en un
proyecto que tenían que llevar a cabo, les dije que si.
El proyecto había sido encargado por la sección
de eventos alternativos de Ogilvy Bassat y consistía en realizar en París una
acción en la calle para la empresa Turismo Andaluz, y que era básicamente
montar en lo Jardines del Trocadero, frente a la Torre Eiffel , de una
especie de feria con la estética de las ferias andaluzas pero con las casetas
llenas de contenidos, culturales, gastronómicos, culturales y de ocio, además
se instalaría un escenario para realizar actuaciones y un espacio de talleres
para niños. Realmente divertido.
Inmediatamente después de terminar lo que estaba
haciendo me incorpore al equipo de esta productora (vamos a llamarla Almazen),
parte del equipo nos conocíamos pues habíamos trabajado un tiempo atrás todos
juntos en otros proyectos, fue una gran alegría, y desde el primer momento me
emociones con el evento...a los pocos días decidí ir a Paris, pues estábamos
atascado y no avanzábamos, busque un par de proveedores en Paris me cite con
ellos y allá que me fui, no se porque me fui en tren, un viaje largo pero
bastante cómodo.
Así fue como conocí a Joulan, fue el único
proveedor que acudió a la cita que había montado en los mismos jardines de
Trocadero, monsieur Joulan que tenia la
mayor empresa de Paris para proveer y montar todo tipo de productos para este
tipo de eventos, desde la confección de carpas (nos hizo unas de 40 m2 ) hasta camiones con
arena de playa (le pedimos arena de playa para el suelo de una de las carpas y
tenia de cinco tipos de arena, desde blanca con trocitos de concha de las
Maldivas, hasta mas dorada de las playas mediterráneas), y expertos montadores
para todo esto, además durante el tiempo que trabajo con nosotros también monto
todo el tinglado para el Roland Garros de ese año, que por cierto gano Rafa
Nadal otra vez.
Una vez realizado el contrato nos asignaron una
mujer que nos atendería en las relaciones con ellos, Dominique, hablaba algo de
español y era absolutamente eficaz y eficiente. En los diversos viajes que
realicé a Paris durante el tiempo anterior al montaje del evento experimenté
esa sensación de estar y no estar en Paris, llegábamos en un avión por la
mañana, íbamos directamente a la sede de Joulin en las afueras, estábamos todo
el día trabajando, (incluso nos traían la comida de un restaurante japonés que
había por las inmediaciones, y a la noche tardé al acabar nos íbamos al hotel y
al día siguiente temprano volvíamos a
Madrid.
Allí contactamos también con Magnum una empresa
de luz y sonido potente que fue la que monto el escenario y toda la cuestión eléctrica,
lo primero que hicieron cuando llegaron al montaje y empezaron a descargar fue
bajar un cajón como los que llevan los racks (cajón de conexiones) pero dentro tenían
instalada una nevera donde tenían la bebida fría y fue lo primero que
enchufaron.
Según fue avanzando la producción a veces iba yo
solo a Paris, o con el director técnico, o con el Arquitecto o con el jefe
Rodolfo, para realizar diversas gestiones propias de su cargo. En uno de los
viajes pensé (iluso de mí) en ir a pedir información sobre la ayuda que nos podían
ofrecer a la Embajada
española en Francia, a la oficina de negocios, fui para alla y ni siquiera me
recibieron fue algo muy frustrante, solo la mujer que atendía en la recepción,
consciente de la ineficacia de aquel organismo, se apiado de mi y me dio un
librillo con empresas de españoles que trabajaban en Paris, y fue excelente
pues allí encontré a mi amigo Tomas que era el que nos había acogido a María y
ami la primera vez que estuvimos en la ciudad, yo le había conocido en Madrid
como actor y seguía dedicándose al teatro, tenia una pequeña compañía (había
recibido un premio importante el año anterior) y estaba muy relacionado en los
ambientes teatreros parisinos, así que la siguiente vez que fui a Paris con
Rodolfo, le llame y casualmente había un estreno en el teatro de allí mismo del
Trocadero, nos invito y asistimos, de la obra recuerdo poco pero si recuerdo
perfectamente que al finalizar la función había una recepción con algunos canapés
y champagne…solo champagne, y allí estábamos mirando desde las grandes
cristaleras del teatro los jardines del Trocadero, con la Torre Eiffel al
fondo y bebiendo champagne, “pas mal”.
Antes de continuar diré que también fui a la
oficina de negocios que tenia la Junta de Andalucía en Paris…directamente no existía,
estaba publicitada alguien recibiría los pagos pero la oficina no existía.
Mi amigo Tomas nos proporciono unos traductores y
chóferes/recaderos (runners les llamamos) todos ellos y ellas españoles o hijos
de españoles con un gran conocimiento de la ciudad y de su trabajo una gente
magnifica en todos los sentidos.
En los viajes que realizamos antes de iniciar el
montaje lo pase francamente bien, cenas en pequeños bistrots, también fuimos
alguna vez a “La coupole”, reuniones en el ayuntamiento en las que todos se
mostraban muy amable, por aquel entonces Anne Hidalgo era Vicealcaldesa de
Paris, luego ha sido Alcaldesa, y es hija de españoles, y por lo general todo
el mundo le gustaba España, Andalucía, Cataluña, Valencia….incluso a algunos
les gustaban mucho los toros y nos hablaban a nostros como si entendiéramos.
En el Ayuntamiento además de las cuestiones de protocolo
tratamos mucho de seguridad, tiene unas normas muy estrictas para esta clase de
eventos, debe de haber supervisión de los bomberos, la policía, e incluso nos pidieron
un informe de cuanto viento aguantarían las carpas en caso de vendaval (60 Km./h),
no me acuerdo como encontramos una empresa que nos hiciera ese informe, solo
recuerdo que el hombre con el que tratábamos era súper amable.
En cuestiones de seguridad anti-violencia o robo encontré
a un hombre marroquí que vivía en las afueras y tenia una pinta de mafioso que
no quiero contar, su trabajo fue eficaz, nos proporciono vigilantes y
auxiliares de día y vigilantes con perros para la noche… una tarde se empeño en
que fuera con el a su oficina y me llevo en su coche con
“chofer/guardaespaldas” en un coche pequeño pero completamente lujoso.
He de decir que me encantan los hoteles, igual
que me encanta alquilar coches esa sensación de provisionalidad me gusta, y
durante los viajes a Paris pude disfrutar de distintos hoteles, desde el Melia
que esta al lado de la “Place Vendôme” (menuda plaza llena de las grandes
joyerías, con unos escaparates realmente sorprendentes, allí empezó a gustarme
Cartier), hasta el Ibis de la “place Cambronne” un hotel de esa cadena barata
pero que estaba en un barrio céntrico pero con vida de barrio, en la plaza
había un magnifico restaurante con cerveza fría y una carne estupenda (aquí
tengo que decir que me encanta el steak tartare, que suele estar en todas las
cartas de los restaurantes y además es un plato de los mas baratos, y el
camarero cuando lo pides siempre dice “ el señor sabe que la carne esta cruda”
siempre lo dice jajaja), también estuvimos en el Hotel Mercûre de 4 estrellas
por lo menos cerca de la Torre Eiffel y con un buffet de desayuno de quesos
para volverse loco, pero el que mas merece la pena recordar (no porque fuera
excepcionalmente bueno) es el Hilton de al lado de la Torre Eiffel, allí pase
mas de tres semanas, cenaba en la habitación muchas noches, y si el desayuno
del Mercüre era bueno el del Hilton sí era excepcional, podías pasarte horas
desayunando, además el comedor estaba rehabilitado y era moderno y acogedor,
los cocineros te hacían cualquier plato que pidieras, había dulces, quesos,
salado y yo solía terminar con arenques…Mm.
Y llegaron los días del montaje, llegaron los de
Joulan con las carpas y los muebles, los de Magnum con la luz y el sonido, la
gente de seguridad, los camiones de Sevilla con el merchandising y la
publicidad, y los jamones, teníamos constantemente dos personas cortando jamón y escanciando fino, y el equipo de producción de Madrid, por lo general un
equipo magnifico, llevábamos gran parte de trabajo hecho era nuestra forma de
trabajo hacer una preproducción minuciosa, con visitas al terreno (el mapa no
es el territorio) de tal manera que cuando llegáramos al lugar tener las menos
sorpresas posibles.
El equipo de producción de Madrid funciono bien
Gil el director técnico, Cata la asistente de dirección, Nata su ayudante, los
guionistas, la gente de los audiovisuales, los coordinadores de las actuaciones
y de las actividades, había actividades para niños, show coking, actuaciones en
el escenario, degustación de jamón y vino…Y una mención especial merecen los
traductores y runners que nos consiguió Tomas, una gente entregada a la causa y
súper eficaces trabajadores y simpáticos.
El caso es que el objetivo de Turismo Andaluz que
era promocionar Andalucía en un espacio que es visitado por turistas de todo el
mundo se cumplió con creces, es decir los casi 20.000 visitantes que van cada
día a la Torre Eiffel pudieron ver la feria desde el mirador de la primera
planta y un inmenso cartel de Andalucía de 20 metros de largo por 55 de alto.
Para ir desde el hotel a la plaza del Trocadero
al montaje, al que solía ir a eso de las 9 de la mañana cogía el metro en Bir-Hakeim hasta Trocadero eran solo dos
estaciones, pero cuando el tren salía del túnel para atravesar el sena con el
sol todavía bajo iluminando con una luz vívida y hermosa la ciudad, me llenaba
de una sensación inenarrable e inolvidable. Para mi fue el trabajo que me hizo
amar Paris y aquellos días no quiero sacarlos de mi memoria