jueves, 22 de octubre de 2020

DOS VECES EN COMPOSTELA

 He estado dos veces en Santiago de Compostela por cuestiones relacionadas con la peregrinación, aunque las dos veces fue hace bastante tiempo y todavía no estaba tán de moda hacer el camino de Santiago.

La primera de ellas fue en 1972 que era un año jubilar y la organización europea de los Boy Scout, de los que formaba parte, decidió hacer una peregrinación y ofrenda al apóstol y esas cosas que se hacían antes. Yo tenia 13 años y sorprendentemente mi padre me dejo ir, tanta confianza debía tener en Cesar el que era jefe del grupo scout y que solo tenia (y tiene)10 años mas que yo, le pedí permiso a mi padre nos debió de dar algo de dinero, no mucho pues en mi casa nunca sobró, y allá que nos fuimos. Quiero aprovechar esta oportunidad para decir que mi formación en ese grupo scout ha sido una de las mayores influencias de mi vida y desde luego absolutamente positiva, y la vocación de Cesar y los otros jefes que tuvimos después ha sido transcendental en el desarrollo de nuestras vidas, escribo esto con 61 años y no muevo ni una coma, estoy tan convencido de ello como lo estaba entonces (aunque no lo sabia).

Además de nuestra veneración cotidiana algún día tendríamos que hacerle una fiesta de agradecimiento a Cesar.

La noche anterior a nuestra partida dormimos en una casa que la familia de Cesar Tenia muy cerca de la plaza de España en Madrid, una especie de solar familiar urbano que luego se demolió bajo la presión de la especulación inmobiliaria, pero que a nosotros durante mucho tiempo no valió para guardar allí trastos y enseres del grupo que no cabían en nuestro local, un pequeño sótano que hay en la Travesía del Almendro.

Creo que me falta alguien pero a este viaje fuimos en un seat 850, como digo en el año 72 cuando llegar a Santiago podía costar 12 horas de viaje aproximadamente por una carretera infestada de curvas a partir de Ponferrada, dicen que yo vomite muchissimo en el coche, pero no lo recuerdo y ademas no les creo jajaja, fuimos Cesar, El Mayor, Navarro, la otra persona que se me escapa y yo, una vez allí nos encontramos con otros miembros del grupo que habían ido por otros medios mucho mas refinados, estaban Armando, Dinesh, y Angel los tres uniformados a la perfección con todas las insignias y dignidades, nosotros eramos algo mas gualdrapas, esa es una de las cosas fantásticas que tenían los boy scout, había todo tipo de gente y sin embargo el objetivo común de nuestra formación en la naturaleza y la diversión a través del montañismo nos igualaba a todos.

Bueno también tengo que decir que este grupo scout era algo especial, los “jefes” eran jóvenes con unas ideas superavanzadas para ese tiempo y a todos nos sirvió mucho, por ejemplo, si bien la autoridad estaba presente también había asambleas de grupo en la que todos podíamos expresar nuestra opinión, algo completamente inusitado en el año 72, y ademas el nuestro fue el primer grupo en acoger chicas scout que habitualmente estaban en una asociación paralela que se llamaba las Guiás de España, es decir fuimos el primer grupo mixto en la historia del escultismo español y el primero en implementar la coeducacion.

No me acuerdo donde dormimos la primera noche que llegamos a Santiago solo sé que nos acostamos en un descampado (debía de ser el monte do gozo) y cuando nos levantamos a la mañana siguiente estábamos rodeados de scouts de todos los países, que estaban celebrando una misa, y nosotros recien levantados.... me fije que las scouts francesas llevaban un plástico colgando de la falda por detrás me preguntaba para que servia hasta que vi que les permitía sentarse en el suelo siempre húmedo sin mojarse...una excelente idea. Inmediatamente nos hicimos amigos de unos portugueses a los que nos fuimos encontrando por los diversos sitios “turísticos” a los que fuimos y ellos nos cantaban una canción que por lo menos El Mayor y yo no hemos olvidado y que decía:

Nos somos de Portugal

nos somos de vous vecinhos

so nos separa de vos

as aguas do rio miño

recuerdo con fuerza que nos los encontramos en uno de esos barcos que cruzan las rías para ir a los pueblos de la otra orilla, un día lluvioso, pero realmente magnifico, ademas ese día Navarro vio el mar por primera vez, y no puedo olvidar verle correr por la orilla pero dentro del agua completamente desaforado y encantado, se empapo y a la vuelta en el barco bajo a la sala de maquinas donde le permitieron secar la ropa encima de los motores o algo así...en aquellos tiempos creo que todo era mas fácil y accesible.

Llovió durante todos los días que estuvimos allí menos la mañana que hicimos la formación y pasamos a besar los pies del santo en la catedral también pasaron el botafumeiro gigante ese que tienen, como digo esa mañana fue soleada y la verdad es que ver la Plaza del Obradoiro llena de scouts uniformados con todas las banderas fue fastuoso y así ganamos el jubileo me parece.....lo cual me ha permitido no tener que andar todos esos kilómetros nunca mais.

La segunda vez que estuve en Compostela también tuvo que ver con Cesar, fue unos años mas tarde y yo solía hacer trabajos en una tienda de deportes que él regentaba, sobre todo enseñando a la gente que compraba una tienda de campaña de esas grandes cuadradas que había, les enseñaba a montarlas, llegue a ser todo un experto y en aquella ocasión habían contratado montar una serie de tiendas para los participantes del Camel Trophy en el pueblo donde iban a cenar y a pasar la noche, en Portomarin, y eso hice, aunque allí al final no durmió nadie...todos se debieron de ir a algún hotel.

Yo el viaje lo realice con un camionero con un camión pequeño en el que ademas de las cosas de camping llevaba algunos otros chismes de la organización, esto lo organizaba la agencia de publicidad de la Phillip Morris y nuestro contacto era, como el lo llamaba, “Juanito Espinosa de los Monteros”, que parece ser que era amigo del camionero que era un tipo muy carcelario...buen tipo pero....uf recuerdo una expresión que me impresiono, que era “darle puñalás al grilo” que significa echarte la mano al bolsillo para sacar dinero ¿?.

Cuando nos levantamos antes de que amaneciera allí en Portomarin De La Cuadra Salcedo que era el director del rally estaba tumbado encima del capo de uno de los land rover, allí calentito con el calor que desprendía el motor en marcha y demostrándonos a todos que el era el que sabia de esas cosas...

Bueno los participantes se fueron por las pistan con los coches y nosotros nos fuimos por carretera hasta Santiago, y haciéndole caso al conductor pedimos dos habitaciones en el Hostal de San Marcos en la Plaza del Obradoiro que era donde se alojaba toda la expedición, creo que fue la primera vez que dormí en un 5 estrellas, una habitación enorme con una cama con dosel, no se que fecha era pero si se que fue el día que emitieron en TVE por primera vez Superman, la de Christopher Reeve y yo la vi tumbado en mi cama en la habitación.

A la mañana siguiente prontito nos levantamos y nos dispusimos para irnos a Madrid y cuando dejamos las llaves en la recepción nos dicen que tenemos que pagar la habitación, que no estábamos en la lista y que teníamos que pagar no se, un autentico dineral, a mi me mudo la cara, no sabia que hacer ni que decir, pero el conductor le dijo al recepcionista que llamara a “Juanito” a su habitación, le despertó y este le dijo que no había problema que se hacían cargo y pudimos irnos, con un gran susto en el cuerpo, sobre todo por mi parte, pero de esa nos libramos.